Ana Maria Gonzales, joven peruana que llegó a Getxo con apenas quince años, ha sido nombrada “Voluntaria del año en Getxo”, por su labor como voluntaria de tiempo libre en Aspace, Asociación de Paralíticos cerebrales de Bizkaia.
Después que su madre reagrupara a la familia y superar las barreras que todo proceso migratoria conlleva, estudió Integradora Social, y ahí es donde empezó su verdadera tarea profesional en el mundo del voluntariado. “Me surgió la posibilidad de realizar prácticas en esta asociación y acepté sin saber donde me metía”, comenta con una sonrisa de oreja a oreja. Oportunidad que le ha ido abriendo puertas a un mundo desconocido.
El siguiente paso lo dió, cuando algunos amigos le comentaron su aportación al mundo de “Monitores de tiempo libre”, animada empezó a participar en las llamadas “salidas de respiro” de fines de semana, llevando a las personas discapacitadas a unas casas adaptadas para tal fin, para que sus cuidadoras y cuidadores pudieran descansar.
La mayor recompensa para esta joven peruana es “una simple sonrisa y que sepan tu nombre cada vez que te ven” esto tan simple te hace olvidar de tus propias preocupaciones.
Ana Maria, "espejo al que mirar e imitar" y como bien dice ella “este mundo me ha atrapado de por vida”.
“Hay personas jóvenes excepcionales”
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